Cuidados de la piel los tres pasos Básicos (18/01/09)

Algo para tener en cuenta, para todas las pieles, es el uso diario del filtro solar, aún en días nublados y también mantener una higiene adecuada para todo tipo de piel.

La piel normal: necesita limpieza e hidratación con fórmulas fluidas y activos como ceramidas y vitaminas. Los tónicos no deben ser secativos. Mantener el equilibrio de la piel depende de la higiene matutina y nocturna y del uso de fotoprotectores. Si presenta granitos y comedones, basta con aplicar geles en pequeñas cantidades que contengan sustancias secativas, cicatrizantes y antimicrobianas.
Hay que evitar lavar el rostro con agua caliente y exponerse al sol en demasía.

Piel mixta: se debe limpiar con jabón a base de árnica y hamamelis, de propiedades astringentes. La oleosidad excesiva en la “zona T” puede controlarse con productos antiacné. El hidratante debe ser no comedogénico con activos como ceramidas, ginkobilova y ácido hialurónico. La zona de los ojos exige productos específicos.
Hay que evitar productos de limpieza agresivos porque resecan las áreas no grasas; lo ideal es un jabón líquido suave.

Piel seca: se recomienda el uso de leches de limpieza suaves y lociones. Este tipo de piel requiere mucha atención en su higiene diaria y mantenimiento. 
Hay que evitar permanecer en ambientes con refrigeración porque aumenta la pérdida de agua; los vientos y el sol en exceso son los factores deshidratantes. No usar esponjas abrasivas. Los baños calientes y prolongados reducen el manto hidrolipídico de la piel. Evitar productos que contengan alcohol.

Piel sensible: ésta requiere precauciones antes de usar productos nuevos; probarlos por algunos días en la parte interna del antebrazo para evitar reacciones alérgicas, por ejemplo. Al momento de elegir los ideales optar por lociones o leches de limpieza que contengan manzanilla y aloe vera. No utilizar jabón líquido o pastillas, tampoco esfoleaciones.
Hay que evitar jabones alcalinos, lociones alcohólicas, productos abrasivos, ácidos frutales (AHA’s) y productos perfumados.

Piel oleosa: lo ideal es usar jabones líquidos en gel o lociones oil-free que no obstruya los poros.
Hay que evitar productos bifase, remover comedones, manosear la piel y los baños calientes que estimulan las glándulas sebáceas. 

Piel negra: para la limpieza conviene realizarla con un jabón líquido suave. El exceso de brillo puede controlarse con base cosmética oil-free. Es necesario hidratarla con producto livianos a base de gel. 
Hay que evitar remover granos y comedones. El resecamiento vuelve la piel áspera y con un tono grisáceo, lo que trae picazón. No se debe rascar para que no quede una mancha.

Conclusión: No olvidar en todos los casos que la piel respira independientemente mediante los poros, para ello depende de la higiene matutina y nocturna, de un buen descanso reparador, de una adecuada alimentación y de la visita quincenal a la cosmetóloga para que el PH esté equilibrado.

By Zuny Rochell, maquilladora profesional, esteticista y maquilladora oficial de Reinas del Nilo. Mail: zumy_07@hotmail.com Tel: 156-1071540 o 4487-1257.

Conceptos:

• Ceramidas: Lípidos presentes en las capas superficiales de la piel, sustancias fundamentales para el perfecto estado de la piel.

• Arnica: es una planta con propiedades antiinflamatorias

• Hamamelis: Son arbustos de hoja caduca o árboles pequeños que alcanzan 3-8 metros de altura. La corteza es astringente y el extracto se usa en medicina herbaria. Los extractos se usan en lociones para afeitados y contra las picaduras de insectos. 

• Ginko bilova: hierba. Los ingredientes activos en el extracto de Ginkgo biloba tienen potentes efectos antioxidantes. 

• Hidrolipídico: Mezcla de emulsión de aceite en agua (de agua y lípidos) que forma el manto natural de la piel. Cubre la superficie cutánea e impide el paso de sustancias nocivas

• Alcalino: pH mayor a 7.